Los retos nunca terminan....
esta frase aparece en un graffiti que veo con frecuencia,
aseguro que no he sido yo, pero es verdad que desde
que le he cogido el gusto a los retos, por una u otra razón
me veo implicada en alguno.
Hoy desde el Sitio de Chus, anfitriona del
Nos propone este tema tan amplio
Yo a la hora de apuntarme no lo tenía muy claro,
pero me acordé que tenía en casa de mí madre
el arca ferroviaria, o baúl de madera de mí abuelo,
un recuerdo de familia.
Podía dar un enfoque diferente
porque no todos los viajes son por placer,
hay personas que se dedican a viajar por obligación,
a los profesionales, a los que se dedican al transporte,
en este caso en concreto al transporte ferroviario
que es el que conozco.
No voy a extenderme, sabemos cuanto
han cambiado las funciones y el modo de trabajar,
desde mediados del Siglo XX a la actualidad.
Por ser de otro modo, otras circunstancias
y otras necesidades, el trabajo de mí abuelo
consistía en acompañar los trenes, iba en un vagón
al cargo de paquetes y de cualquier imprevisto
que pudiera acontecer a lo largo del recorrido,
el viaje duraba varios días, y por lo tanto
tenía que ir provisto para el viaje y su llegada
al lugar de destino de comida y ropa.
En la arca ferroviaria
llevaba ropa, sabanas y mantas y documentos,
para la comida llevaba un cesta de mimbre.
Sé que el arca la hicieron a medida,
sobre los años cuarenta, los hermanos de mí abuela
que eran carpinteros
Como se puede ver se encuentra en buen estado,
algo descascarillada la pintura, pero sin problemas extructurales,
mide 38cm x 33cm x 30cm, de madera de pino.
la tapa y las esquinas está reforzada con chapa.
Como no disponía de mucho tiempo,
después de limpiar y un lijado superficial,
limpié a fondo la chapa donde aparece el nombre
el cargo y la residencia.
Dos manos de pintura de tiza en rosa claro
y algunas pruebas con unas preciosas rosas de
papel de arroz.
Al final me decido por esta composición
y elijo pintura verde provenza de tiza para
la tapa y la parte trasera, a tono con la imagen,
para el frente y los laterales los dejo en rosa
Termino con cera incolora para proteger el trabajo.
Aquí podemos ver el ayer y el hoy,
modernos trolley, como el que ha utilizado mí marido
y el arca antigua de madera de mí abuelo.
Después de tantas fotos me queda pendiente terminar el interior
no vamos a volver a dejarla en el cuarto de los trastos,
ahora se merece una nueva ubicación y utilidad.
Con este trabajo le ponemos la guinda al mes de FEBRERO
Gracias por llegar hasta aquí espero que os haya gustado el cambio,
me encantaría saber vuestra opinión.
Si me acompañáis a visitar a Julie
podemos ver nuevas propuestas en